¡Permite que Dios exceda tus límites!





En el pasaje del Evangelio de hoy, Jesús tiene que lidiar con una petición que estaba fuera de los parámetros de su misión. Cuándo la mujer de cananea le pide que sane a su hija, él contesta, "No. Mi misión es sólo con los israelitas". Sin embargo, él le da lo quepide cuandosu persistenciademuestra quesu deseoviene de una feverdadera en Cristoy en su misión. Jesús no es de decir "no" cuando nuestra Fe es real y nuestra solicitud le permite cumplir su misión.

Nuestros parámetros mentales, siempre se están interponiendo en nuestro camino. Esto se llama, "ser conservador y convencional en el pensar". Encajonamos ordenadamente nuestra comprensión del mundo, de Dios, de la Fe, de otros, e inclusive de quienes somos y de cuál es nuestro potencial. Esto es una trampa. Hay mucho más en la vida cristiana que lo que hay dentro de los parámetros corrientes. Necesitamos arriesgarnos a pensar más allá de nuestros límites.

¿Cuáles son las limitaciones que nos atrapan en nuestras cajas mentales? Una vez que las identificamos, podemos crecer más allá de nuestras limitaciones.
¿En qué maneras tratamos de atrapar a Dios en nuestras cajas? ¡Permite que Dios exceda tus límites!

Aquí está un ejercicio espiritual: Cuándo entres a la iglesia y mojes tus dedos en el agua bendita para hacer la señal de la cruz, hazlo con tu mano IZQUIERDA. ¿(Cuál mano utilizan los zurdos)? ¿Parece de algún modo algo sacrílego hacer la señal de la cruz con la mano "equivocada"? ¿Por qué? ¡Sal de tus límites!

Un día, una mujer se acercó a mí en la iglesia para preguntarme si tenía cambio de un billete de $20, porque ella no tenía billetes de un dólar para pagar por la vela que ella quería encender para una petición de oración. Yo no tenía dinero en efectivo, así que le dije, "A Dios no le importa si usted enciende una vela sin pagar por ella. Es la oración en la que él está interesado". (Si ella realmente quería ayudar la iglesia, ella podría aumentar su donativo en la colecta del domingo). Mis comentarios la estremecieron. No eran "apropiados".

Estos son ejemplos de las pequeñas maneras en las que permanecemos atrapados dentro de nuestras limitaciones. Hay maneras más grandes, parámetros que impactan nuestras vidas y las vidas de los demás tanto que realmente pecamos cuando escogemos permanecer dentro de nuestras limitaciones. Para crecer en la santidad, debemos prestar atención a la frecuencia con que nos aferramos a lo que NO ES HABITUAL o esperado o previamente programado.

Necesitamos arriesgarnos a seguir a Jesús más allá de nuestros límites. Necesitamos también tener la fe de la mujer cananea para derribar las paredes de los parámetros pre-programados. Esto es importante, porque allí, en el gran más allá, es donde descubrimos que Dios es más grande de lo que nos imaginábamos. Estamos tan acostumbrados a permanecer dentro de nuestros límites que nuestra confianza en Dios es basada en una suposición inconsciente de que él está limitado como nosotros.

La verdad es: Cuándo parece que Dios nos falla, es porque nosotros lo hemos encajonado junto con todos los humanos que nos han falladoPara descubrir que Dios no nos ha fallado nunca, tenemos que liberarnos de nuestras expectativas preconcebidas.
 
Reflexión de Las Buenas Nuevas
Miércoles de la Décima Octava Semana del Tiempo Ordinario
7 de agosto, 2013

Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada bajo la responsabilidad de grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org , registrada en el registro de propiedad literaria (c) 2013. Para obtener permiso para reenviar este o imprimirlo o copiarlo, vaya a Derechos de autor
© 2013 por Terry A. Modica




Reflexiones para el Alma

"Una hora de visita al SANTISIMO a la semana nos da la gracia de vivir 168 horas felizmente"
(Solo 1/168 parte del tiempo semanal)
Matemáticas para el Alma.
"Si queremos evangelizar al mundo, cada uno de nosotros debe empezar por tratar de convertirse en santo."
~ Arzobispo John Patrick Foley

Lecturas del Día  
Números 13:1-2, 25 - 14:1, 26a -29a, 34-35
Salmo 106: (4a) 6 -7 ab, 13-14, 21-23
Mateo 15:21-28