¿Quién te está ayudando a levantar tu manta?




¿Estás cansado? ¿Necesitado de un buen descanso? La primera lectura de hoy habla del "descanse en paz" en que entraremos después de pasar por esta tierra, SI somos obedientes a la Palabra de Dios y tenemos fe en sus promesas - las promesas que Jesús cumplió en su muerte y resurrección.

Sin embargo, hay mucho más para nosotros en estos versículos si recordamos que la escritura no pretende ser una zanahoria colgada justo fuera del alcance de nuestra vida actual. (Para aquellos que no les gustan las zanahorias, piensen en las galletitas de chocolate). Dios se preocupa por nosotros demasiado como para hacernos babear sobre promesas de las que no podemos recibir un poco aquí y ahora.
Entrar en el reposo de Dios no necesita esperar, necesita fe - fe en que Dios realmente se preocupa por ti y está trabajando en un plan para tu beneficio, así como por el bien de todos aquellos que están involucrados en tu situación difícil. Aunque tenemos que esperar a que ese plan se complete, la oportunidad de descansar en paz está disponible ahora.

Creemos que no podemos tener paz hasta que se acabe el problema, pero esto es una suposición equivocada. Cuando sufrimos un cansancio abrumador, no es debido a  problemas, es porque no estamos valiéndonos de la paz que Dios provee. Un poco de esta paz nos viene durante nuestros momentos de silencio, solos con Dios. La mayoría de las veces, la ofrece a través de la comunidad.

Jesús no hizo nada por su cuenta. El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo siempre trabajaron juntos, no sólo porque son un sólo Dios, sino porque la naturaleza de Dios es comunidad - una comunidad interactiva. Recuerda que Él nos creó en esta imagen. Nos diseñó para la vida comunitaria. Usa la comunidad para la implementación de sus planes.
Ninguna promesa divina se cumple sólo para nuestro bien. No hay descanso para los cansados a menos que la comunidad nos ayude a llevar las cargas.
Mira la historia de la lectura del Evangelio de hoy. El paralítico recibió una sanación debido a sus amigos. ¿Tienes por lo menos cuatro amigos que te lleven cuando estás cansado de tener mala salud o angustia mental o pruebas espirituales - un amigo para cada esquina de tu manta, por así decirlo? Nómbralos, dales las gracias y pasa algún tiempo de descanso con ellos.
¿Qué te está haciendo enmudecer? ¿Qué está paralizándote para hacer lo que estás llamado a hacer? ¿Qué te ha llevado a sentarte al costado del camino de tu crecimiento personal? En lugar de intentar averiguar cómo levantarte y caminar, únicamente por tu propia fuerza, ¡descansa! Dios nunca pensó para ti que avanzaras por ti mismo. Descansa en la ayuda que Dios que te está dando a través de la comunidad.
Para recibir su ayuda, tenemos que dejar caer nuestros muros de individualismo y acudir a donde encontremos comunidad. Cada parroquia tiene una variedad de oportunidades, desde ministerios organizados hasta eventos sociales. No tiene sentido pensar que podemos estar en una buena relación con Dios sin unirnos a su comunidad.

Reflexión de las Buenas Nuevas

Viernes de la 1ra. Semana del tiempo ordinario
Enero 16, 2015< Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada bajo la responsabilidad de grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org/ReflexionesDiarias/
 

 © 2014 por Terry A. Modica


Lecturas de hoy
Heb 4, 1-5. 11
Sal 77, 3. 4bc. 6c-8
Marcos 2, 1-12

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No hay promesa divina que se cumpla sólo para nuestro bien.