Dos meses y medio se pasan tan rápido cuando se está en tan buena compañía, con gente querida.Y así, después de tanto preparar el viaje, de llamadas entre mi hijo y mi marido para ponerse de acuerdo en horarios, fechas; después de elegir la ropa adecuada para llevar y que cupiera dentro de los límites que se puede usar en el pesaje de las aerolíneas; después de dejar encargada mi casa, mis animales (3 perros, 1 gata y 1 pez), de llorar por ellos (increíble que me doliera tanto dejarlos, más que a muchas personas que conosco) pensando en que me extrañarían, en que los dejaba empezando el verano y con ello, las molestias de garrapatas y pulgas que por éstos lugares son inevitables si se tiene a los animales en los patios como es mi caso :(
A mi pobre perrita cocker de 15 años la dejé trasquilada para que no sufriera tanto con el calor y los parásitos :( Es cierto que existen estéticas caninas, pero en éstos momentos no cuento con ninguna entrada de dinero: por la edad, no me dan trabajo en las fábricas o limpiando hoteles o casas, no cuento con el beneficio de la ayuda para adultos mayores porque aún no cumplo 65 años (es poco, pero para algo sirve), tampoco cuento con pensión del seguro o issste porque aunque siempre he trabajado, desde hace muchos años, lo hago en casa o limpiando casas. Aunque guardé en el afore voluntario una pequeña cantidad mensual (lo que me permitían los pocos ingresos que obtenía con el trabajo en internet) no es suficiente más que para alguna emergencia.
Así que tomé unas tijeras y le corté el pelo lo mejor que pude. A mis otros peluditos los dejamos bañados (ellos tienen menos humor para las pulgas y garrapatas) pero mi pobre cocker siempre ha batallado con ellos.
Me fuí preocupada por ellos, aunque los dejé en buenas manos. Tan buenas, que al regresar los encontré muy repuestos, sin garrapatas, pues mi hijo les compró unas pastillas para ellas. Así como compró un líquido para poner en las entradas y ventanas de la casa. Gracias a él y a su esposa, mis animalitos están bien. Me encontré a mi cocker con pelo, jejeje y a los otros repuestos (el pigbull mestizo estaba medio flaco al irnos y ahora está gordito)
Mi hijo venía todas las noches a darles de comer, después de un largo día de trabajo, pues dada sus responsabilidades y gracias a Dios, tiene un buen trabajo, pero le exije mucha entrega. Mi nuera también está muy ocupada con sus diversas responsabilidades, pero se turnaban para venir a ver a mis animalitos.
Creí que al llegar, encontraría mi casa dada al cuas. Y no es así. Claro que algunas de mis plantas necesitan podarse, mi bugambilia necesita irse amarrando a la malla en donde se encuentra, mis tomates sucumbieron a la falta de agua, así como algunas otras plantas que no aguantaron la larga sequía. Me sorprendió encontrar granadas en mi árbol, pensé que no daría nada :(
Mis nopales ahí están, esperando ser cortados y comidos mmmmm.
Traje algunas semillas de Francia. Semillas de uva, durazno, chiles. Algunas de pinos y frutos rojos silvestres. También de limón, naranja, toronja, mango. Como las envolví en servilletas no sé cuál es cuál, así que tendré que esperar para ver si se dan y qué es lo que se da de todas las que traje, jajaja.
Son muchas emociones las que tengo. Tristeza porque dejé a mi nietecito, porque mi hijo no tiene por allá a nadie de la familia Aunque debo agradecer que la familia de mi nuera lo trata muy bien, también que han encontrado a varios amigos de orígen latino con los cuales conviven de vez en vez, así como vecinos o padres de niños que han ido con mi nieto desde la guardería.
No están sólos, gracias a Dios. Pero como madre y abuela, siento dejarlos.
Mi corazón se encuentra dividido en dos: mi hijo mayor se encuentra aquí junto con su esposa. También la familia de mi nuera es muy linda hasta con nosotros, siempre nos invitan a fiestas o reuniones, o a cumples en albercas. A veces no he sido tan agradecida como debiera con ellos. Esto lo entendí estando en Francia.
A veces no valora uno lo que tiene, o no lo valora suficientemente.
Y por otro lado, mi hijo menor vive tan lejos, que aunque nos hace videollamadas, nuestro nietecito no nos ve como algo familiar. Nos costó volver a ser aceptados por él. Fué nuestra lucha éstos dos meses y medio. A mi esposo lo aceptó más fácilmente que a mí :(
De hecho, él estuvo haciéndose cargo de que comiera, porque es medio especial para hacerlo: se para, juega, regresa, come un poco y vuelve a pararse. Mi esposo andaba con la cuchara por la sala para que comiera jajaja
Yo traté de jugar con él con rompecabezas y otros juegos que tiene, pero siento que ya le aburren. Los conoce super bien. Le gustaban mucho antes, porque en la guardería no jugaba así. Ahora ya en preescolar, juegan con lo mismo que tiene en casa y ya no le gusta tanto.
Ahora le encanta brincar, cantar, tocar la guitarra e instrumentos musicales. Le encanta jugar con los cojines de la sala, le encanta jugar a las escondidas (cosas que pude hacer con él), pero siempre me da un poco de miedo jugar a los juegos que como niño le gustan ahora: guerra de cojines, le gusta subirse a las piernas y bajarse como si fuera "tubo, tubo", juegos en los que no puedo cooperar mucho, porque me da miedo me lastime las venas de mi mano :( Como niño y más como niño de mi familia y la de mi marido, es bastante inquieto, tiene mucha energía.
Así que mi esposo es perfecto, le aguanta la batalla. También le gusta salir en su veló (bicicleta) o mejor dicho, triciclo a pasear, le gusta que lo dejen suelto en las bajadas y que corran a detenerlo (cosa que a mi esposo le cuesta, pero a mí se me da mejor jajaja) Le gusta ir a los parques, subirse a los juegos, pero sobre todo, encontrarse con sus amiguitos y jugar con ellos.
En fin. Hicimos lo que pudimos para ganarnos su atención. Lo logramos, gracias a Dios, pero sé por experiencia que pronto nos volverá a ver sólo como imágenes en un teléfono con los que no puede saltar, ni brincar, ni salir al parque. Lo extrañaremos mucho más de lo que él nos extrañará a nosotros.
Eso es difícil. Tenemos sólo un nieto y lo tenemos lejos. Eso me hace sentir decepcionada, triste y deseosa de ser parte más activa de su vida.
Con los hijos, uno debe ser más enérgica, tiene uno mucho más participación en la responsabilidad de cuidar de ellos, de ser sus proveedores, sus guías, su sustento y sostén. Con los nietos, uno puede disfrutar de la alegría sin tener tanta responsabilidad- Alguien me dijo alguna vez que son la corona de los abuelos. Una corona de dulzura que tanto se necesita cuando llega la vejez, como en nuestro caso.
Y mi corona no es propiamente dulce. Me deja la sensación de dolor más que de dulzura. Mi hijo mayor no tiene hijos, por lo tanto no tengo nietos de él. Y el único nieto que tengo, está muy lejos.
También tengo un poco de decepción. Bien dicen que los planes de Dios son mejores que los que uno puede pensar. Debo decir que nunca me he sentido totalmente aceptada en donde vivo, ni siquiera por la familia que ha llegado después. También debo decir que me gustaría vivir cerca de otras personas que aunque no son mi sangre, fueron mi familia cuando llegamos y durante 8 años. También me gustaría vivir con mi hijo, mi nuera y mi nieto. Cosa que por supuesto no es posible, porque todos deseamos tener la independencia que da el tener su propia casa, su propio espacio y por las cuestiones de leyes migratorias y demás.
La cabeza entiende todo éso, pero el corazón no tan fácilmente entiende.
Por lo tanto, siento soledad. Mi casa la siento fría, triste. Me prometí no llorar, pero no puedo evitarlo. Me prometí no renegar, pero no puedo evitarlo.
A veces siento que no es justo. Cuando veo a tantas personas tener hijos y nietos y no cuidarlos. O hasta pelear con ellos, pero los tienen cerca, pienso que no es justo que yo tenga al mío tan lejos.
Pero me consuela saber que el camino de la santificación es un camino de rosas, por lo que las espinas lastiman muchas veces. Si fuera de pétalos sería super, no?
Doy gracias a Dios porque me dió la fortaleza de vivir muchas situaciones que antes me hubieran hecho saltar a la primera, me hubieran hecho meterme en lo que no debo (no digo lo que no me importa, porque la vida de mis hijos y de mi nieto, me importa siempre), contuve lágrimas y pedí sonrisas ante varias situaciones. Dios me lo concedió y le doy gracias por ello.
Me dí cuenta también de lo frágil que es mi fé, que debo regarla continuamente como a mis plantas, si no, se seca como ellas. Encontré tiempo para orar, seguramente no tan santamente como debiera, muchas veces me encontré deseando se acabaran las oraciones, me encontré forzándome a terminar un Ave maría o la oración al Divino niño (me llevé varias estampas con oraciones) me forzé a rezar el rosario. Escuché misa pocas veces porque los horarios no se me daban, mi libro de Adoración nocturna fué mi sostén. En fin, mi fé como mis plantas necesita poda, abono y agua, pero está viva como mis plantas.
Espero la misa de mañana después de 2 meses y medio. Espero la comunión con el Cuerpo y la Sangre de Cristo como mis plantas esperan mis cuidados.
Agradecida con Dios, agradecida de haber podido ir a Chartres a encender una vela por el favor de no sufrir de nuevo hemorragias en mi mano como sentí debí hacer. La última vez que sangré fué ahí, le pedí me ayudara, que no me dejara. Y no lo hizo, gracias a Dios. La primera visita que hicimos fué a Chartres.
También estuvimos en varias iglesias como ya he comentado La última visita fué a la Catedral de Notredame. Nos sentamos en unas gradas que pusieron enfrente de ella para que la gente pueda orar, contemplar la belleza de su arquitectura o simplemente sentarse a comer un bocadillo. Pude admirar las imágenes que ahora han vuelto a lucir su blancura, falta aún mucho para que se terminen las obras de reconstrucción y no se puede aún entrar, pero aproveché para orar, para admirar su belleza, para ver a la Virgen coronada en el cielo en uno de los arcos y en el otro, se ve la Dormición de la Virgen. En medio se puede ver a Jesús rey, sentado en su trono, rodeado de ángeles. Es hermosa Notredame.
En un local cercano se puede admirar una maqueta de ella. Y es impresionante. Espero tener la dicha de poder entrar algún día.
Con la Virgen de Chartres me sucede algo especial. La iglesia está dedicada a la Asunción de la Virgen. Se puede apreciar una hermosa representación de ella en el altar principal.
Mi nieto fué concebido en un lugar de Croacia un día, iban paseando y tomaron una foto de una iglesia que les llamó la atención pues había una celebración con juegos pirotécnicos. Era el día de la Asunción de la Virgen. Igual que la Catedral de Chartres.
Coincidencia o no, es algo que me hace sentir una conexión especial con ésa Catedral. Llevo una imágen de la Inmaculada que me regalaron ahí.
Aunque la Catedral de Chartres está dedicada a la Asunción de la Virgen, la imágen que se venera y se conoce como Virgen de Chartres es la de la Virgen del Pilar. Eso me sacó de onda la primera vez que fuí, buscaba algo distinto. A la Virgen del Pilar o por lo menos, una igualita a ella es a quien se venera ahí.
Virgen de Chartres o de la Clandestinidad (éste nombre porque estaba la imágen en un subterráneo donde era venerada ) Se dice que es una imágen anterior a la existencia de la Virgen María, es decir, se veneraba a "la Virgen que vendrá o que concebirá al Hijo de Dios" como había sido prometido
Es una de las llamadas Virgen negra, por el color. Ha sido blanqueada para darle el color de las catedrales y templos que tenían originalmente. De hecho, la Catedral de Chartres al igual que otras, ha sido limpiada del humo, tierra y demás que le daban un tono grisaceo a la piedra de que está construida y ahora se ve con su color original. Se ha desatado una discordia porque muchos se oponían a que fuera blanqueada, aduciendo racismo hacia las personas de color. Lo cierto es que originalmente es blanca por la piedra de que está hecha, la cual fué ennegreciendo con el humo de las velas y con el paso del tiempo.
Las vidrieras de la Catedral de Chartres son algo que vale la pena contemplar. Puede uno pasarse horas admirando los detalles de la vida de las personas, de Jesús, de la Virgen, de santos pintadas en vidrio.
Los vitrales de la Catedral de Chartres son famosos no sólo por ser uno de los conjuntos más grandes y mejor conservados del mundo, sino también por su azul translúcido, que no se encuentra en ninguna otra parte. Estos vitrales así como las paredes de la catedral y sus numerosas esculturas y relieves se han sometido a una intensa campaña de limpieza y restauración
Uno de los vitrales sobre los signos zodiacales de la Catedral de Chartres.
Los constructores de Chartres pueden compararse con orgullo con los romanos. Gracias a la mejora en el conocimiento de la geometría, propiciada por los avances de las matemáticas, la relación en las medidas aplicadas se acerca mucho a la considerada perfecta en la Antigüedad, es decir, a la llamada proporción áurea, basada en el número fi.
En la construcción de la catedral intervinieron un equipo de no menos de trescientas personasentre canteros, transportistas, albañiles, herreros, carpinteros y vidrieros.
Pese a la magnitud del proyecto, los trabajos avanzan con una celeridad excepcional, puesto que se construye en los decenios económicamente más florecientes de la Edad Media. En apenas veinticinco años se concluyen las obras más importantes, gracias al aprovechamiento de materiales del templo románico. Pese a todo ello, la iniciativa es tan descomunal que la catedral no puede consagrarse hasta 1260. A la ceremonia asiste el mismísimo rey Luis IX de Francia.
Equipo ganador
Los impulsores de la catedral de Chartres son sus obispos, y su enorme coste se sufraga con donativos y rentas de todos los ciudadanos. En ella interviene un equipo de no menos de trescientas personas, entre canteros, transportistas, albañiles, herreros, carpinteros y vidrieros, que trabajan de sol a sol seis días a la semana.
Estos grupos de artesanos forman cuadrillas itinerantes, constituidas en gremios en torno a una logia. Al frente de todos los gremios, coordinando y dirigiendo, se encuentra el maestro de obras, o arquitecto.
El que traza los planos de Chartres queda en el anonimato, pero es, sin duda, un perfil bien pagado y con una alta consideración social. Los maestros de obras son a la vez escultores, ingenieros y matemáticos, pero se consideran a sí mismos, por encima de todo, geómetras. Su tarea no se limita a planificar la construcción; también tienen que corregir, a veces con sus propias manos, las esculturas que van a colocarse en las fachadas u otros espacios del templo.
Detalles intencionados
La de Chartres, además de un templo, es un microcosmos en el que se sintetizan todos los conocimientos de la época. En esta catedral se exponen todas las manifestaciones sociales y culturales, así como historias y logros políticos. Cabe allí desde la exaltación de las dignidades reales y eclesiásticas –con esculturas o imágenes en las vidrieras de reyes, héroes, papas, santos y obispos– hasta la de nobles o de miembros de los gremios y oficios. Incluso existe un espacio iconográfico reservado a la fiesta y la trasgresión.
Hasta 175 representaciones de la Virgen pueden contarse en vidrieras y esculturas
La catedral está llena de detalles en fachadas y puertas, desde donde se lanzan innumerables mensajes. Los programas iconográficos de las dos portadas laterales reflejan esta intención. La portada norte, en la que nunca incide directamente la luz del sol, recoge escenas del Antiguo Testamento, con esculturas de los patriarcas, las virtudes, las bienaventuranzas y las ciencias. En cambio, la sur, esta sí bañada por el sol, está dedicada al Nuevo Testamento: Cristo preside el Juicio Final, donde los justos son salvados y los pecadores condenados al infierno.
Todavía se conservan algunas esculturas en piedra en el exterior del lado sur que recogen elementos burlescos, como un asno bailarín y encabritado que muestra obscenamente sus testículos, o un cerdo que toca el laúd, fiel reflejo de una sociedad en la que, en algunas fiestas, como la del asno o la de carnaval, el orden social se subvierte por unas horas.
Chartres es, sobre todo, el templo de la Virgen María. Hasta 175 representaciones de la madre de Dios pueden contarse en vidrieras y esculturas, además de las imágenes que se conservaban en el interior. Esta catedral no es la más antigua, ni la más grande ni la más alta de las góticas europeas, pero entrar en este templo es sumergirse en un espacio de piedra y vidrio bañado por una luz muy especial.