El amor sincero

amor de familia

El amor sincero

el amor de Dios 10

La lectura del Evangelio de hoy nos recuerda que los intentos mediocres y vagos de amar a Dios y servirlo son muy poco satisfactorios. No es solamente porque Dios nos extraña cuando no estamos completamente presentes con él. Es también porque la fe mediocre no es suficiente fe para ayudarnos en los tiempos difíciles.

La fe sincera es lo que nos permite amar a los demás cuando ellos son difíciles de amar, COMO nos amamos a nosotros mismos. La palabra "como" es esencial. Nosotros no podemos amar a los demás más de lo que nos amamos a nosotros mismos, y no podemos amar a Dios más de lo que amamos a los demás, por que lo le hacemos a los demás se lo estamos haciendo a Dios. Y lo que nos hacemos a nosotros mismos se lo estamos haciendo a Dios.

¿Cuán bien te cuidas a ti mismo? Si no eres bueno contigo mismo, el ser bueno con los demás trae resentimiento dentro de ti, y ahora tu bondad llega a ser un pecado. Igualmente, si atendemos más nuestras propias necesidades que las necesidades de los demás, el egoísmo nos separa de Dios tanto como nos separa de las personas que estamos descuidando.

Para romper el ciclo del amor a medias, necesitamos permitir que el amor de Dios nos consuma. Este es el primer paso para amarnos en una manera justa y sana. ¿Qué está haciendo él para cuidar de ti en este momento? ¿Qué QUISIERA él hacer que no le permites hacer porque estás demasiado ocupado o tienes miedo de ser egoísta o piensas que no te lo mereces?

Necesitamos comenzar cada día con un tiempo a solas con Dios para que podamos ponernos en contacto con su amor por nosotros y nuestro amor por él.Debemos hacer esto antes que algo suceda que quizás desafíe nuestro consentimiento a amar a los demás, a nosotros mismos o a Dios con todo nuestro corazón. ¡Leer estas reflexiones no es suficiente! ¿Has meditado en su amor en un ambiente pacífico?

El segundo paso, mientras estamos todavía en oración de la mañana, es de permitir que el amor de Dios por las demás personas nos consuma. Si hay alguien en tu vida hoy que es muy posible que te cause problemas, pasa un tiempo poniéndote en contacto con el amor de Cristo para esa persona. El murió por los que nos causan problemas. El llora por ellos. El desea abrazarlos y curarlos y dirigirlos a las alegrías de vivir sagradamente.

El tercer paso es de decir sí a darles más de lo que recibimos de ellos. Decimos sí a permitir que nuestro amor sea consumido por las personas que nos necesitan o que nos molestan. Esto no significa olvidarnos de nuestras propias necesidades. Sin embargo, si significa ir a la cruz por los demás, como lo hizo Jesús. Significa que en vez de demandar recibir tanta bondad de los demás como nosotros les damos a ellos, nosotros estamos dispuestos a darles aun más. Ahí es cuando nos damos cuenta del amor sincero de Dios para nosotros. Si pedimos a Dios que viva en los hoyos enormes que han dejado los demás, nosotros tenemos más espacio para su presencia que mora en nosotros.

¡Dios te ama con todo su corazón, con toda su alma, y con toda su mente! En la Eucaristía, nosotros consumimos este amor enteramente-Dios, este amor interminable e infinito. Y a hacer así, nosotros consumimos su amor por los demás. Nosotros entonces llegamos a ser la Eucaristía para los demás cuando le damos este amor a todos alrededor de nosotros. Llegando a ser lo que recibimos, tenemos mucho más que dar de lo que podemos imaginarnos.

Reflexión de Las Buenas Nuevas Viernes de la Vigésima Semana del Tiempo Ordinario 19 de agosto, 2011

Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada bajo la responsabilidad de grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org , registrada en el registro de propiedad literaria (c) 2011. Para obtener permiso para reenviar este o imprimirlo o copiarlo, vaya a Derechos de autor© 2011 por Terry A. Modica

"Una hora de visita al SANTISIMO a la semana nos da la gracia de vivir 168 horas felizmente"

(Solo 1/168 parte del tiempo semanal)

Matemáticas para el Alma.

"Si queremos evangelizar al mundo, cada uno de nosotros debe empezar por tratar de convertirse en santo."

~ Arzobispo John Patrick Foley

Reflexiones para el Alma

Para nuevos suscriptores.......AQUI

Lecturas del Dia
Ruth 1:1, 3-6, 14b-16, 22

Salmo 146 :( 1b) 5-10

Mateo 22:34-40