La alegría sobrenatural de amar la obediencia


Paz del corazon




En el pasaje del Evangelio de hoy, Jesús deletrea los tres elementos básicos de la fe: la obediencia, el amor, y la alegría. El amor es el núcleo; lo que mantiene a la obediencia y la alegría juntas. Cuando desobedecemos, es porque no comprendemos por qué es desalmado; no nos damos cuenta de que nuestro pecado interviene con nuestra capacidad de amar y ser amado. Por otro lado,cuando obedecemos porque amamos, experimentamos una gran alegría. Like us on Facebook

Obedecer porque amamos es tener una fe madura. Cuando niños, nosotros obedecimos primordialmente porque temíamos el castigo. Para experimentar la alegría, tenemos que dejar las razones infantiles por las cuales obedecemos las órdenes de Dios. La obediencia adulta es esto: Amamos tanto a Dios que queremos seguir a Jesús en todos los aspectos y en cada circunstancia, porque sabemos que él nos ama y que sus mandatos siempre están basados en el amor (aun cuando no comprendemos cómo), y sabemos que podemos confiar en él. Seríamos insensatos si desobedeciéramos.

Y amamos a los demás tanto que no queremos pecar contra ellos.Follow us on Twitter

El amor es como el aire alrededor de nosotros: Podemos cerrarnos y nunca respirar el aire, y así nosotros nos moriríamos. Igualmente, podemos cerrar nuestros corazones y nunca recibir el amor que penetra de Dios en cada momento, y así nuestras almas se mueren lentamente. Pero cuando obedecemos a Dios, imitando la santidad de Cristo siguiendo sus mandamientos, nos unimos a él y por lo tanto somos sumergidos en su amor y por lo tanto experimentamos la alegría espiritual.

Si comprendemos realmente lo que ocurre en el Sacramento de Reconciliación, la alegría es nuestro sentimiento primordial cuando salimos del confesionario. Es una alegría que viene de descubrir de nuevo que a pesar de nuestra desobediencia, Dios todavía nos ama, y que al reconciliarnos con él nosotros nos hemos abierto para recibir y experimentar su amor más completamente otra vez.

Considera cualquier mandamiento el cual tienes dificultad obedeciendo, ya sea de la Biblia o de las enseñanzas de la Iglesia. Pídele al Espíritu Santo que te revele cómo este mandamiento está basado en el amor. ¿En qué maneras estás entendiendo mal el amor que está intrínsecamente allí?

En la primera lectura de hoy, los primeros cristianos tuvieron que aprender a extender su amor por Dios para incluir a los Gentiles. Todos necesitamos permitirle a Dios que nos extienda más allá de nuestros límites actuales de amor.Para crecer en la santidad, tenemos que crecer más allá de las viejas y familiares maneras de tratar con las leyes que no nos gustan y con las personas que son difíciles de querer. Ese es el secreto de encontrar la alegría sobrenatural. Like us on Facebook Follow us on Twitter

Aquí esta una gran oración para comenzar cada día:

"Querido Dios, yo quiero obedecerte hoy;

Ayúdame a permanecer cerca de ti.

Gracias por ser tan bueno conmigo;

Te amo y quiero amarte más.

Señor Jesús, sé mi alegría.

Cuando sea tentado a pecar,

ayúdame a amar a los demás más completamente.

Quiero permanecer en Tú amor;

Ayúdame a obedecer el llamado a amar".

Reflexión de Las Buenas Nuevas
Jueves de la Quinta semana de Pascua
10 de Mayo, 2012

Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada con permiso bajo la responsabilidad de grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org, registrada en el registro de propiedad literaria (c) 2010. Para obtener permiso para reenviar este o imprimirlo o copiarlo, vaya a Derechos de autor


© 2012 por Terry A. Modica

obediencia

Reflexiones para el Alma Efesios 6, 11 - 13

11. .Lleven con ustedes todas las armas de Dios, para que puedan resistir las maniobras del diablo.

12.Pues no nos estamos enfrentando a fuerzas humanas, sino a los poderes y autoridades que dirigen este mundo y sus fuerzas oscuras, los espíritus y fuerzas malas del mundo de arriba.

13. Por eso pónganse la armadura de Dios, para que en el día malo puedan resistir y mantenerse en la fila valiéndose de todas sus armas.


Lecturas del Día:

Hechos 15:7-21

Salmo 96:1-3, 10

Juan 15:9-11


Siganos y Opine en:

Like us on Facebook Follow us on Twitter

Sorpresa Espiritual Aqui