¿De verdad crees?



¿De verdad crees? 

Al comenzar la última semana antes de Pentecostés, Jesús nos pide, en el Evangelio de hoy: ¿Ahora crees, que yo salí de Dios? ¿Que yo soy Dios? ¿Que yo soy tu Señor? ¿Que yo te amo fielmente y sin condiciones? ¿Eso es lo que digo en verdad todo el tiempo? "¿De verdad crees?" 

En la primera lectura, San Pablo se pregunta: "¿Recibisteis el Espíritu Santo al aceptar la fe?" La respuesta a esa pregunta es: , durante el bautismo recibimos la plenitud de la presencia de Dios. El Espíritu Santo es la presencia de Cristo nuestro Salvador dentro de nosotros.

Pero... ¿de verdad crees eso? Hay una diferencia entre recibir el Espíritu de Dios, sacramento y vivir en el Espíritu como un creyente lleno de fe. Para vivir plenamente por la fe se requiere estar plenamente comprometidos con un estilo de vida cristiana activa, confiando en que el Espíritu Santo nos ayuda a ser más santos cada día, continuamente nos purifica para que seamos cada vez más unidos a la plenitud de Dios a través de los dones de todos los sacramentos y en la comunidad eclesial. 

Los verdaderos creyentes tienen una relación de confianza con Dios.Se arrepienten de sus pecados y se dan cuenta de que están perdonados, por lo que hizo Jesús el Viernes Santo. Entienden que con este perdón son capaces de ir al cielo a causa de lo que hizo el día de Pascua. Nada es posible sin el Espíritu Santo.

¿Cómo sabes que el Espíritu Santo está activo en ti?Hablar en lenguas y pronunciando profecías inspiradas por Dios, como vemos en el relato de los Hechos, no son las únicas indicaciones, ni son necesarias. Son sólo algunos ejemplos de signos externos. Lea atentamente lo que Jesús nos dice en este pasaje del Evangelio: La creencia verdadera trae la paz, aun en medio del sufrimiento! 

Una vez más, esto sólo es posible sobre la base del Espíritu Santo. Perdemos la paz cuando confiamos en nuestros propios recursos y nuestras limitadas percepciones de los problemas que enfrentamos. La fe, la esperanza y la paz interior viene de confiar en el Espíritu de Cristo, que es la energía más alta detrás de todas nuestras superaciones, y que vive dentro de cada uno de nosotros como una fuente de gracia a la espera de ser puesto en libertad. 

© 2013 por Terry A. Modica; todos los derechos.
Para compartir esto con otros, ver nuestra autorización pag copyright

Reflexiones de las Buenas Nuevas
Lunes de la VII Semana de Pascua
13 de mayo 2013 
 
Lecturas de hoy:
Hechos 19:1-8
Sal 68:2-7AB (con 33 bis)
Juan 16:29-33

La familia que reza unida, permanece unida



"La familia que reza unida, permanece unida..... La familia que reza unida el Rosario reproduce un poco el clima de la casa de Nazaret: Jesús está en el centro, se comparten con él alegrías y dolores, se ponen en sus manos las necesidades y proyectos, se obtienen de él la esperanza y la fuerza para el camino!"