¿Qué es el buen liderazgo? Vemos ejemplos de ello en los Santos Pedro y Pablo y, por supuesto, en Jesús mismo.
En la historia del Evangelio de hoy, Pedro reconoce que Jesús es el mesías y luego es llamado a ayudar a que los demás a que descubran la misma verdad. A todos los que estamos en algún tipo de posición de liderazgo se nos ha dado esta misma responsabilidad. Es nuestra misión primaria como seguidores de Cristo.
No sólo los sacerdotes son pastores. Los padres han sido enviados por Cristo para pastorear a sus familias. Los maestros han sido enviados a pastorear a sus estudiantes. Los empleadores han sido enviados a pastorear a aquellos que trabajan para ellos.
Pastorear significa lo siguiente: aun cuando no podamos evangelizar con palabras, debemos mostrar cómo es Jesús mediante nuestras acciones, actitudes y compasión.
Pablo sufrió en su ministerio de pastor (ver la primera lectura) tal como lo hizo Jesús y como lo hacemos nosotros si nos involucramos lo suficiente como para lograr una diferencia. La buena noticia es que las fortalezas del mal ("las puertas del inframundo") no pueden prevalecer ante nuestros esfuerzos inspirados por Cristo.
Las "puertas" son los caminos para escapar del mal de los demás. Para los seguidores de Cristo, cada responsabilidad de liderazgo incluye pastorear a aquellos que necesitan ser rescatados guiándolos hacia Jesús, que es La Puerta. Un líder cristiano que no va al territorio de Satanás para rescatar a las almas, ni protege a su rebaño de extraviarse en el peligro, no es un seguidor de Cristo porque esta fue exactamente la misión de Cristo.
Aquellos que son esclavos de estilos de vida pecaminosos y de las trampas del diablo, rechazan nuestros esfuerzos, pero no dejes que eso te detenga. En cambio, considera lo que los está encarcelando: la raíz de la motivación para casi todo lo que hacen, viene de una necesidad insatisfecha de encontrar pastos seguros de amor incondicional. Esto significa que, con mucho amor incondicional de parte de los que nos rehusamos tercamente a ser expulsados, ellos pueden ser pastoreados más y más cerca del perdón y del poder salvífico de Dios.
No podemos arrastrarlos a través de la puerta, pero podemos enseñarles el camino -- el camino del amor y la misericordia -- y rezar para que ellos eventualmente reconozcan su oportunidad de escape. ¡Este es nuestro llamado!
El fragmento inspiracional de hoy: Las fortalezas del mal no pueden prevalecer contra nuestros esfuerzos inspirados en Cristo.
Reflexión de las Buenas Nuevas
Miércoles de la 13ra. Semana del Tiempo Ordinario
Solemnidad de San Pedro y San Pablo, Apóstoles
Junio 29, 2016
Oración para hoy
Amado Señor: que tu Espíritu me guíe en todos mis caminos y su unción sea la fuerza que me impulse a ir donde Tú me envíes. Amén.
© 2016 por Terry A. Modica. Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, y es utilizada bajo la responsabilidad del grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami, Fl. Fuente: Good News Ministries en http://gnm.org/reflexiones-de-las-buenas-nuevas/ donde también se encuentra disponible una reflexión para los Domingos. La reflexión para los sábados puede ser encontrada en: http://gnm.org/mirada-interior/ | 
