Traer luz al pecado, es la manera de Cristo

Traer luz al pecado 2

Para poder hablar de algo que nos incómoda y nos quita la alegría, me gustaría utilizar las escrituras del día de hoy para poder escribir algo en contra de los escándalos en nuestra amada Iglesia. Es muy perturbador cuando el escándalo del abuso de niños está en las noticias; pero hay también otros abusos como a las vocaciones sacerdotales que también causan dolor, y las personas que me escriben acerca de esto generalmente es porque han recibido muy poca ayuda de las autoridades más altas.

Somos el Cuerpo de Cristo experimentando purificación. Y esto incluye toda clase de abusos: (intimidación, abuso verbal, relaciones lujuriosas entre adultos, etc.) que son cometidos por gente débil que incluye al clero como al laicado que se refugian en de Iglesia, y que nos continúan desafiando a la purgación comunal para que la Iglesia pueda ser resucitada en un mejor "Sirviente de Salvación" para el mundo.

Y la purificación incluye que tenemos que cuidar y amar mucho al abusado y también amar a los abusadores; y por supuesto amar mucho y orar por los sacerdotes y religiosos santos que tenemos, para que lleguen a ser modelos visibles a imitar. 

Cualquier forma de abuso o respuesta negativa al abuso por un cristiano es un pecado grave, porque daña el Cuerpo entero de Cristo alejando a los incrédulos que están mirándonos y mucho mas.

¿Qué tan lejos debemos llegar para detener esto? ¿Qué estamos dispuestos a sacrificar para sanar el Cuerpo de Cristo?

En la lectura del Evangelio de hoy, Jesús indica que los que hacen el mal prefieren la oscuridad para que su maldad pueda continuar pasando desapercibida. La mayoría de nosotros, sin embargo, tendemos a contribuir a esta oscuridad. Cuando presenciamos abusos, tenemos miedo de hablar por temor a la represalia, o nos da miedo de tomar medidas porque es pecado hará ver mal a la Iglesia, o pensamos con miedo al saber que no hay suficientes sacerdotes y es preferible tener uno malo que ninguno, o nosotros tenemos miedo de incomodarnos y hablar.

La buena nueva es que: ¡La luz de Dios ha entrado en el mundo! El Señor quiere revelar lo que ha estado oculto.  Los pecados deben ser expuestos para que el pecador pueda dirigirse al arrepentimiento, y este problema debe ser manejado públicamente, para que el mundo vea lo que el amor verdadero es, y al igual que la santidad, debe ser expuesta para que otros sean inspirados a la vocación de un sacerdocio sagrado.

Lo que vemos en la luz es a veces muy feo, repulsivo, escandaloso, y causa consternación, ¿pero no fue así como se vio Jesús en la cruz? Si sinceramente preferimos la luz, nosotros daremos gracias a Dios por la cruz de los pecados expuestos y confiamos en su Espíritu Santo mientras esperamos la resurrección inevitable. Aunque traer luz al pecado para la purificación es muy doloroso, es realmente la manera de Cristo. El Nuevo Testamento está lleno de tales historias. La cruz es el único camino a la redención. Jesús redime escándalos sacando mucho bien de ellos. 

Como proclamamos en el salmo responsorial de hoy, "el Señor oye el grito del pobre". No importa lo mucho que hemos sido lastimados o hemos causado dolor a los demás, Dios nos salva de la aflicción si nos refugiamos en él. El Espíritu Santo nos ayuda a vencer nuestros pecados,sana nuestro dolor, y nos dirige a nueva vida. 

Reflexión de Las Buenas Nuevas Miércoles de la Segunda Semana de Pascua 18 de Abril, 2012

Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada bajo la responsabilidad de grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org , registrada en el registro de propiedad literaria (c) 2012. Para obtener permiso para re enviar este o imprimirlo o copiarlo, vaya a Derechos de autor

 2012 por Terry A. Modica
Traer luz al pecado

Reflexiones para el Alma Efesios 6, 11 - 13

11.

Lleven con ustedes todas las armas de Dios, para que puedan resistir las maniobras del diablo.

12.

Pues no nos estamos enfrentando a fuerzas humanas, sino a los poderes y autoridades que dirigen este mundo y sus fuerzas oscuras, los espíritus y fuerzas malas del mundo de arriba.

13.

Por eso pónganse la armadura de Dios, para que en el día malo puedan resistir y mantenerse en la fila valiéndose de todas sus armas.


Lecturas del día:
Hechos 5:17-26
Salmo 34:2-9
Juan 3:16-21
Join Our Mailing List!

Sorpresa Espiritual AQUI