Permite que tu luz brille


Todo lo que hacemos debe revelar la luz de Cristo

Jesús dice en la lectura del Evangelio de hoy que nadie prende una lámpara para esconderla. Tú y yo - nuestras vidas han sido iluminadas por la luz de Cristo, por supuesto él quiere que otros se beneficien de esto. Las buenas noticias son tan buenas que queremos que todos aquellos que están buscando luz en sus vidas encuentren a Jesús. Queremos que otros vean a Jesús resplandeciendo a través de nosotros para que su fe crezca.

Las personas alrededor de nosotros deberían tener acceso a las razones de por qué Jesús ha hecho una diferencia en nuestras vidas de modo que ellos puedan ser animados por nuestro ejemplo y testimonio.

Interesantemente, Jesús conecta esto con otro principio importante de nuestra fe: "a aquellos que tienen, se les pedirá más." Trata de "en términos de responsabilidad" entender por qué Dios le daría más a aquellos quienes ya tienen mucho.  Cuando reconocemos nuestras responsabilidades de difundir la luz de Cristo, nos damos cuenta de las oportunidades adicionales de revelar Cristo a otros.

Las oportunidades ocurren cada día en nuestras circunstancias ordinarias. Todo lo que hacemos debe revelar la luz de Cristo.Aquellos quienes fallan en tomar seriamente la necesidad y la importancia de compartir esta luz están escondiendo sus lámparas bajo la cama de la pereza.

Quién a tú alrededor está sufriendo por una tragedia o dificultad? Ellos están instintivamente buscando una luz que los llevará a la esperanza, al amor, la sanación y la restauración de la bondad Qué estás haciendo para darles más de la iluminación de Cristo?

Quién alrededor tuyo tiene insuficiente fe? Ellos quieren que se les asegure que a Dios le importa; están listos para crecer. Dirías sí a las responsabilidades que Dios ha colocado en frente tuyo para hacer una diferencia?

Hay muchas razones de por qué escondemos nuestras lámparas. Quizás asumimos que la evangelización es la responsabilidad de alguien más. O miramos la oscuridad de otros y no nos sentimos preparados; esto pasa por desconfiar de la habilidad de Cristo para iluminar a otros a través de nosotros. O tenemos miedo al rechazo y persecución

En cada caso, nosotros permitimos que la oscuridad del desánimo, la negatividad y desesperanza se expanda y nuestra luz se opaca.

Pero cuando permitimos que la luz de Cristo ilumine nuestras vidas tanto que nos cambia, naturalmente crecemos en la preocupación por otros y su nivel de fe. Disfrutamos abrirnos nosotros mismos a otros de modo que ellos puedan ver a Jesús brillando en nosotros.

Si sientes que no estás preparado para aprovechar las oportunidades que tienes ahora para dejar a Cristo brillar a través de ti, aprovecha la gracia extra que está disponible en el Sacramento de la Reconciliación para convertirte en la luz para la que has sido llamado.Deja que la preocupación por otros sea el combustible para tu luz.



Reflexiones de las Buenas Nuevas
Lunes de la Vigésima Quinta Semana del Tiempo Ordinario
Septiembre 23, 2013
Memorial de San Pío Pietrelcina

Esta reflexión fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada bajo la responsabilidad de grupo católico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org/ReflexionesDiarias/index.html


, registrada en el registro de propiedad literaria (c) 2013.
© 2013 por Terry A. Modica

Lecturas de hoy:
Esdras 1:1-6
Salmo 126:1b-6
Lucas 8:16-18




ORACIÓN 

Bienaventurado P. Pio, testigo de fe y de amor. Admiramos tu vida como fraile Capuchino, como sacerdote y como testigo fiel de Cristo. El dolor marcó tu vida y te llamamos "Un crucificado sin Cruz".

El amor te llevó a preocuparte por los enfermos, a atraer a los pecadores, a vivir profundamente el misterio de la Eucaristía y del perdón.

Fuiste un poderoso intercesor ante Dios en tu vida, y sigues ahora en el cielo haciendo bien e intercediendo por nosotros.

Queremos contar con tu ayuda. Ruega por nosotros.
Lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.